viernes, 28 de marzo de 2014

Material para la biblioteca


Desde el SOV de la CNT-AIT de Jaén hacemos un llamamiento a todos los colectivos sociales o individualidades para solicitar donación de material para nuestra biblioteca, que lleva por nombre “Francisco Olaya”, pequeño homenaje a este luchador anarcosindicalista de nuestra tierra fallecido hace ahora tres años. Hace poco que inauguramos el local y pensamos que la biblioteca debe ser una parte fundamental de él, intentando hacer de ella una fuente de conocimiento y autoformación para todo aquel o aquella que lo desee, además de una herramienta de empoderamiento colectivo que nos ayude a crecer en todos los sentidos. Por ello, agradeceríamos vuestra colaboración ayudándonos a completar unas estanterías que reclaman a gritos ser ocupadas.

Para contactar con nosotrxs escribidnos a: sov@jaen.cnt-ait.es

Salud y anarquía.

lunes, 24 de marzo de 2014

Taller de lectura - "De la cima al abismo: contradicciones entre el individualismo y el colectivismo en el anarquismo español"

Desde CNT-Jaén hemos organizado un Taller de Lectura en nuestro local (calle Los Ángeles, número 3) que pretende generar dinámicas de autoformación militante. La primera reunión tendrá lugar el jueves, 27 de marzo, a las 20:00.

El primer texto que vamos a trabajar es De la cima al abismo: contradicciones entre el individualismo y el colectivismo en el anarquismo español, un artículo del investigador Chris Ealham. El artículo se puede leer y descargar pinchando AQUÍ.

Con estos talleres pretendemos recuperar, aun con un pequeño gesto, la tradición cultural ateneística que tan bien han sabido representar las organizaciones del movimiento libertario en el estado español. 

El taller es abierto por lo que, si lo deseas, puedes participar en él. Si tienes alguna duda o quieres conocer más datos del club de lectura, te animamos a que remitas un correo al mail del Ateneo: ateneocntjaen@gmail.com

miércoles, 19 de marzo de 2014

Negros presagios: política anarquista en la época del colapso

Ha sido algo evidente desde hace décadas. Sólo con la combinación de grades dosis de ignorancia, arrogancia y autoengaño se ha conseguido caricaturizar un diagnóstico perfectamente lógico como los desvaríos irracionales de unos marginados apocalípticos. Pero ahora, conforme la realidad nos abofetea repetidamente se asume al fin, si bien con rapidez, que hay que admitir la existencia de una pauta regular. Ya no se puede seguir mirando a otro lado: la civilización industrial está colapsando. De hecho, ya estamos en el ojo del huracán. Los precios de la energía se han disparado, como consecuencia de haber alcanzado recientemente el pico en la producción global de petróleo y su consiguiente e inevitable declive posterior. Huracanes, sequías y patrones climáticos impredecibles se han vuelto más frecuentes e intensos, haciéndonos sufrir las consecuencias del calentamiento global que nosotros mismos hemos provocado. Mientras, la calidad del suelo y del agua se sigue degradando, la biodiversidad se desploma, con una tasa de extinción de especies 10.000 veces superior a la normal. A su vez, la tremenda crisis de los precios de los alimentos en que se ve sumido el globo en estos momentos es la indicación más poderosa, hasta el momento, de que ya no cabe esperar la vuelta a la situación anterior. Por el contrario,  lo que vemos es la batalla final entre la necesidad infifinita de crecimiento del capitalismo neoliberal y los  recursos limitados de un único planeta. Y ni con toda la ingeniería financiera o los inventos de última tecnología que el dinero pueda comprar va a escapar el sistema a su inevitable derrumbe. Se ha llegado al punto de inflexión y nosotros somos la generación a la que corresponde el dudoso honor de vivir y morir en sus últimos estertores. 
Muchos de los autores que participan en este volumen (1) han celebrado el auge de la actividad de las anarquistas y sus temáticas, conforme reaparece la oposición al capitalismo en todo el planeta. Y sin embargo, cuando se intenta dar una perspectiva internacional del porvenir de estas prácticas, hay que enfrentarse a negros presagios. Las anarquistas y sus aliadas tienen que proyectarse a un futuro de inestabilidad y deterioro crecientes, y reinventar sus tácticas y sus estrategias a la luz de las crisis convergentes que van a ser características del siglo XXI. 
 
Este artículo parte de la trayectoria de colapso que se observa ya en el capitalismo a escala global, analiza algunas de sus consecuencias sociales y las plantea como retos que tiene que afrontar la futura práctica del anarquismo. Es evidente que no tiene sentido abordar esta tarea desde un punto de vista pretendidamente neutral, que se limite sin más a señalar las tendencias presentes sin hacer recomendaciones, propuestas o indicaciones. Desde el momento en que se intenta prever y no sólo predecir, se abre el espacio para sugerir cuáles podrían ser las prioridades para las anarquistas en los años venideros.
 
Uri Gordon (Loughborough University).
- Traducción de Miguel Pérez.
 
- DESCARGA EL ARTÍCULO COMPLETO PINCHANDO AQUÍ.
 
(1) Publicado en:Contemporary anarchist studies: an introductory anthology of anarchy in the academy. Edited by Randall Amster, Abraham DeLeon, Luis A. Fernandez, Anthony J.  Nocella, II, and Deric Shannon. 2009, pp. 249-259, London.

miércoles, 12 de marzo de 2014

Sexualidad infantil y control social: el discurso de los abusos como método de disciplinamiento


Sexuality in Childhood and social control: the discourse of abuse as a method of discipline.

INTRODUCCIÓN 

En la sociedad actual, los niños son objeto de un control casi absoluto. Carentes de toda autonomía y privados de cualquier capacidad de decisión, cada minuto de su día a día está fuertemente controlado, sometido a vigilancia, incluido dentro de un horario. Bajo el objetivo de la protección, los niños son sometidos a un control cada vez más intenso, especialmente en lo que se refiere a sus relaciones con otros niños y, sobre todo, con otros adultos. Profesores, vecinos, monitores, familiares: todos pueden cometer abusos, todos son sospechosos, todos deben ser vigilados. El pederasta es el nuevo monstruo social, el catalizador de todos los temores y las iras de la sociedad. 

Sin embargo, esos monstruos sociales no aparecen de forma espontánea. Responden a una forma de organización social y a una distribución del poder concretas, a unas estrategias de dominación y a unos intereses determinados. Cuando se analiza el origen del actual discurso sobre los abusos durante la infancia, descubrimos que aparece en un momento y un lugar muy concretos: la década de los años ochenta en Estados Unidos. En esa época, los medios de comunicación comienzan a inundar la opinión pública con noticias sobre supuestas redes de pederastia y sectas satánicas que secuestraban, torturaban y abusaban sexualmente de niños. Aunque nunca se encontró ninguna prueba de que dichos grupos existiesen, las noticias y los debates que se emitían por la televisión a todas horas cumplieron su objetivo: crear una creciente sensación de inseguridad y miedo en torno al sexo, que comenzó a ser asociado con la idea de peligro. La sexualidad se convertía en el espacio privilegiado para el disciplinamiento de los individuos. 

Si analizamos los grupos que están detrás de la difusión del discurso del abuso, vemos que la mayoría de los expertos que lanzaron el mensaje del miedo pertenecían a un sector social muy concreto: la derecha ultraconservadora americana. Los tertulianos que se sentaban en las mesas de debate para alertar sobre los peligros que podían sufrir los niños y lanzar furibundos ataques contra aquellos que consideraban que se estaba alarmando innecesariamente a la población, pertenecían a grupos relacionados con las iglesias evangélicas y la derecha conservadora. Y ese discurso respondía a su visión de la sociedad, a sus intereses de control y disciplinamiento social. Esto no quiere decir que no existiesen casos reales de abusos sexuales durante la infancia, pero sí que se sobredimensionaron e incluso crearon de la nada para favorecer unos intereses muy concretos: los de aquellos que quieren moldear un determinado tipo de sociedad basada en la dominación de unos pocos sobre el resto. No es casualidad que ese discurso tuviese a los niños como principal objetivo, ya que fabricar adultos obedientes pasa por fabricar niños obedientes. Si se consigue crear niños atemorizados, aislados y sometidos, podremos crear adultos incapaces de rebelarse, de cuestionar el orden actual de las cosas. Habremos acabado con la posibilidad del cambio. 

Layla Martínez (politóloga y sexóloga). 

Descarga del artículo completo pinchando AQUÍ.

sábado, 1 de marzo de 2014

"Los satisfechos", de Trasto Teatro, en el local de CNT-Jaén


CNT- Jaén tiene el gusto de invitaros a la representación de Los Satisfechos; una obra de Raúl Cortés representada por la compañía de teatro autogestionaria Trasto Teatro. Os pasamos a continuación algunos datos con información relevante sobre la compañía y la obra a representar.

Por la Cultura y la Autogestión: teatro para todxs.